miércoles, mayo 10, 2006

ANGEL DE TU GUARDA

Ángel de tu guarda,
en eso me he convertido.
Tu dulce compañía,
que en amargo silencio,
 
atesoro en instantes intocables.
No te desamparo,
 
ni de noche ni de día.
Obsesivo sentimiento, 

de toda hora tortura eterna.
Ni en la hora de la muerte,

mi muerte.
Así sea,

así es.

martes, mayo 09, 2006

CUANDO NO ME VES


Cuando no me ves, te miro.
Me apodero de tus detalles:
del lunar en tu oreja,
de tus pequeños labios,
de tu misterioso cabello.
Y todo se vuelve mío,
habita en mis recuerdos
y se convierte en mi tormento.

CASTIGO


Te espero, no llegas.
Me asomo por tu ventana, no te veo.
Aguzo el oído, no te escucho.

Extiendo mi mano, no te encuentro.

Veo un fantasma,  eres tú.

AMOR QUE NACE MUERTO



No eres consciente del demonio que has desatado en mí,

sentimiento antiguo y doloroso,

por prohibido, por imposible.

¿Qué hago ahora contigo?

No tengo otra opción que padecerte,

por prohibido, por imposible.

Sensación de impotencia, por querer y no poder.

Sentimiento condenado a muerte,
pero vivo aún aquí y ahora.

Ayúdame a no prolongar esta agonía. 

Mátalo.
Agonía de tenerte en mí cabeza en todo momento y lugar.

Agonía de sentirte en mi corazón en todo momento y lugar.

Todo me habla de ti -dolor-

No puede brotar lo brotado,
no puede vivir lo vivido
Palabras y gestos que nunca saldrán, aunque ya están.
¡Qué hago con ellos! 
Dios mío ayúdame.
Sentimientos vivos en mí, que nunca trascenderán a ti.

Amor que nace muerto,

se pudre dentro de mí.

Corazón convertido en sepulcro

TRISTE ILUSO
















Me pregunto:
Cuando estás junto a mí

¿Qué piensas?

¿Qué sientes?

Me ilusiono.

Veo un gesto,

una sonrisa,

una mirada.

Señales falsas,

vanos espejismos,

alimento doloroso.

Leños arrojados a las brasas 

de la realidad,
que luego me devorarán vivo

SENTIMIENTO FASTIDIOSO













Enamoramiento,

sentimiento fastidioso.
Me perturbas,
me molestas.

No sé que hacer contigo.
Sentimiento de muerte,
de agonía.
Vieja herida otra vez abierta,
tarde o temprano cobras lo tuyo.
Huir de ti, es imposible.
Te duermes,

y más tarde que temprano, 

despiertas para que yo muera